Por: Jose
Antonio Sánchez Gandoy
Miembro de la Comisión Nacional de Kata.
Profesor Numerario y Cinturón Negro
8º DAN de Judo.
Juez Nacional de katas. |
Shiro
Saigo |
Tsunejiro
Tomita |
Junto
a la figura de Jigoro Kano, fundador del judo, crecieron historias y vidas
que han posibilitado que el Judo sea hoy el más famoso arte marcial
de cuantos han existido.
Shiro
Saigo:
Muchos
hombres tuvieron un protagonismo excepcional dentro de este método
de defensa y entre todos ellos, quizás el mas emblemático
haya sido Shiro Saigo, que fue el primer cinturón negro, junto
con Tsunejiro Tomita, cuya vida ayudó a proyectar y engrandecer
esta nueva disciplina marcial. Él, fue el judoka escogido por Kano
para plasmar en combate, tal como lo había concebido, la eficacia
del Judo-Kodokan que años atrás había creado.
Shiro
Saigo, asumió la responsabilidad de imponer en cada una de las
competiciones en las que se enfrentaba a los mas variados y expertos luchadores
del ju-jutsu, la superioridad del judo. Sus combates contra las mas afamadas
escuelas y sus distintos estilos, siempre tuvieron el mismo resultado.
Estas fueron vencidas por el emergente poder del nuevo judo. Así,
entre los alumnos del maestro Kano, se resaltaban cada vez con mas fuerza
los triunfos contundentes del excepcional Saigo.
Shiro Saigo: Este judoka nació el 04 de febrero de 1866 en el pueblo
de Aisu. Su nombre, Shida Shiro, (Shiro "cuarto hijo"), llegó
a Tokyo en 1881 donde fue adoptado por una familia de la que tomó
el apellido Saigo y siguió practicando el ju-jutsu de la escuela
"Tenshi Shinyo Ryu" con el maestro Inoue. Aunque algunas publicaciones
dicen que fue en 1883 cuando conoció a Jigoro Kano, según
el libro de Kodokan, en mayo de 1882 cuando Kano abrió su escuela
con 12 colchonetas y nueve alumnos, Saigo ya era uno de esos nueve primeros
alumnos y también comenzaba a mostrarse como uno de sus preferidos.
Joven
especialmente dotado para el combate, a pesar de su corta estatura (rozaba
el 1,50 m, pero debemos tener en cuenta que en esa época la estatura
media japonesa estaba sobre 1,60), consiguió victorias de todo
tipo derrotando a rivales casi siempre mucho mas corpulentos. Fueron los
contínuos éxitos obtenidos en sus peleas ante estos expertos
los que comenzaron a forjar su leyenda.
Uno
de los triunfos mas relevantes lo alcanzó ante un equipo de ju-jutsu
que varias veces había retado a los judokas de Kano, como este
no contestaba a sus desafios, los ju-jutsukas se acercaron directamente
al Kodokan con la pretensión de vencer al judo en su propia casa.
Jigoro Kano les recibió amablemente y aceptó la invitación,
designando de inmediato al judoka que se enfrentaría al famoso
campeón de ju-jutsu, Sakujiro Yokohama, apodado "Oni",
(demonio) de complexión formidable, mucho mas pesado, mas fuerte
y alto, y temible luchador).
Según
los documentos de la época, pactadas las reglas se iniciaron los
combates. El mas esperado de todos ellos era el de Saigo contra el ju-jutsuka
Yokohama y el combate así lo relatan las crónicas de la
época:
"
... Confiado, Yokohama avanzó con energía hacia Saigo, pero
de inmediato fue derribado por un aplastante yama-arashi. Encorajinado,
de nuevo se lanzó contra él y un barrido volvió a
proyectarle. Una vez tras otra Saigo con "yama-harashi" ,su
movimiento especial, conseguía derribar al ju-jutsuka."
Esta secuencia se repitió muchas veces durante el combate, hasta
que finalmente el propio Yokohama, agotado, se declaró vencido
al pronunciar la palabra "maitta" (me rindo) tras casi treinta
minutos de lucha". Mas tarde Yokohama, pidió ser aceptado
como alumno en el Kodokan-Judo, donde fue admitido.
Entre 1883/87 tuvieron lugar la mayoria de confrontacionesde y fue especialmente
decisiva la que enfrentó a Kodokan-judo contra expertos de la escuela
de Tosuka ju-jutsu donde se libraron 15 combates. El judo se proclamó
vencedor en trece de ellos y los otros dos fueron combates nulos. La superioridad
mostrada siempre por Kodokan sobre los existentes métodos de lucha
fue entonces reconocida por sus adversarios y a partir de ese momento
la propia policía japonesa adoptó sin reservas el naciente
Judo como su Arte Marcial de Defensa.
*
El ju-jutsu, comenzó a sufrir entonces un traumático
declive.
Después,
Jigoro Kano, que incluso llegó a ser presidente de la organización
Butokukai de Artes Marciales, impulsó el judo desde todas las esferas
posibles hasta convertirlo en deporte obligatorio en la enseñanza.
Entonces el Kodokan- Institute tomó un plano privilegiado en la
enseñanza, en la cultura y en la sociedad.
Al
mismo tiempo, la figura de Saigo no dejaba de crecer popularmente entre
la gente y comenzaron a divulgarse aún con mas fuerza sus éxitos
por todo Japón. Era el hombre a imitar por los adolescentes nipones
y durante años fue considerado por todos como un símbolo
a quien intentar emular. Gracias a su persona, como ocurre ahora con los
mas famosos deportistas, el judo multiplicó por cientos el número
de jovenes practicantes.
Paralelamente,
el competidor Shiro Saigo, gozaba de un gran prestigio dentro de su circulo
de grandes judokas en el Kodokan-Judo. Así, el propio Jigoro Kano
durante uno de sus largos viajes a Europa le dejó al frente del
Kodokan nombrandole director en 1888, lo que mostraba la enorme consideración
y respeto que le profesaba, pues otros grandes senseis de Kodokan no habían
gozado de tal honor.
Con el paso del tiempo el carácter indómito y demasiado
activo de Saigo, le acercó a una vida difícil que marcó
unos años oscuros en los que convivió con demasiados problemas
personales. Esto le apartó definitivamente del judo y de Kodokan
e hizo que en 1891 se retirase desde Tokyo a la ciudad de Nagasaki, donde
volvió a practicar otras disciplinas como el kyudo, el aikydo,
etc. en las que también se distinguió por su maestría.
Allí rehizo su vida colaborando como crítico de artes marciales
japonesas en un periódico de la ciudad.
Finalmente, el que fuera emblema y protagonista de excepción en
este arte marcial y en su historia, falleció el 23 de noviembre
de 1922, a los 56 años, alejado del judo con el grado de 5º
Dan.
Cuando el fundador del judo, Jigoro Kano, se enteró de la muerte
de quien había sido su excepcional judoka, le otorgó a
título póstumo el grado de 6º Dan.
Diploma
6º Dan
* En una de las plazas de su ciudad, se levanta una estátua conmemorativa
como homenaje permanente a este verdadero genio, brillante y excepcional
judoka, que fue Shiro Saigo.
*
Cuando hablamos de Ju-Jutsu, Jiu-Jitsu o Ju-Jitsu, todos los términos
empleados se refieren a la misma modalidad de lucha, aunque la forma genérica
y la denominación mas correcta para referirse a este arte marcial,
sería la de "Ju-Jutsu", como referencia a las disciplinas
del antiguo Japón.
*
Los organismos que entonces y en el futuro inmediato dirigían las
artes marciales niponas, una vez creado el Kodokan, eran dos, el "Kosen"
y el "Butokukai". En 1897 se creó el Butokukai, Asociación
de Virtudes Marciales del Gran Japón (Escuela Nacional de Artes
Marciales) con sede en Kyoto, de la que Jigoro Kano en 1889 llegó
a ser presidente. El Kosen, la otra gran formación creada sobre
1900, agrupaba a los alumnos correspondientes a la Escuela Superior Profesional
(estudios, artes, oficios, etc) y eran expertos en la especialidad de
ne-waza o judo suelo.
*
En el momento en que el JUDO ya gozaba de una gran expansión, gentes
de otros esferas sociales como la cultura o el arte, se interesaron por
él impulsándolo aún más e introduciéndole
en los mas altos niveles de la jerarquizada sociedad nipona. Por medio
de su gran competidor Saigo, el judo se hizo altamente popular y jóvenes
y adultos hablaban y se interesaban cada día por este arte marcial.
*
Tengamos en cuenta que el judo Kodokan, según cuenta su historia,
a partir de 1884 y hasta 1886 hubo de hacer varias confrontaciones contra
diversas escuelas de ju-jutsu y vencerlas ante los tribunales formados
por los grandes maestros de la época para poder ser acogido como
el verdadero arte marcial moderno. La policía japonesa, tras el
Festival de Artes Marciales creado para tal fin y donde el Judo arrasó
literalmente al resto de disciplinas de combate, lo instauró como
defensa personal obligatoria para sus agentes y en 1886 se unió
a las enseñanzas de Kodokan.
Posteriormente
fueron creadas varias katas de judo de ataque y defensa tras la reunión
durante varios días de los mejores maestros de artes marciales.
Aún hoy perduran y son katas oficiales para los exámenes
de Danes.
Tsunejiro Tomita:
Fue
otro de los hombres importantes en la historia del judo, ya que ha sido
el primer alumno oficial del Kodokan y también el primero en alcanzar
el rango de 7º Dan. Saigo y Tomita fueron compañeros de entrenamiento,
amigos en Kodokan, y ambos el mismo día, los primeros cinturones
negros de la historia. La unión de las dos personalidades, su amistad
y las experiencias vividas posibilitaron que muchos años mas tarde
el judo llegase al gran público mediante un libro de enorme éxito
en Japón.
Esta
es la historia:
El
maestro Tsunejiro Tomita (personalidad preferente en el Kodokan de Kano)
era uno de aquellos primeros nueve alumnos con los que Kano inició
la andadura de su nueva disciplina. La gran personalidad a lo largo de
sus extensas vivencias en los tatamis y su alto nivel técnico hizo
que fuese ,junto con Saigo, el primer cinturón negro de judo de
la historia. Es reconocido como uno de los pilares de Kodokan desde su
existencia.
Jigoro
Kano confió todo su judo y su organización a cuatro grandes
y excepcionales maestros y Tsunejiro Tomita es uno de ellos.
Además
en la vida de Tsunejiro Tomita coincidió un hecho excepcional que
dió una espaldarazo vital para el judo y que fue protagonizado
por uno de sus hijos, Tsuneo Tomita. Este, dedicado a las artes, era un
brillante escritor que en pocos años terminó convirtiéndose
en una personalidad de enorme rango en la cultura japonesa, su famosa
obra "Shugata Sanshiro", también llamado "Sanshiro
Sugata" catapultó aún más este arte marcial
en todo el Japón.
En
este libro se desgranan, entre otras cosas, las vivencias de un joven
que llegado de un pueblo a la ciudad pretende adentrarse en una nueva
escuela de ju-jutusu y se encuentra con el naciente judo. El carácter,
el honor, la perseverancia, etc, los valores que se presumían como
esenciales para ser un maestro o discipulo de esta disciplina dan forma
a una historia casi tomada de la realidad, en la que Tsuneo Tomita, documenta
su relato contando casi de primera mano algunas secuencias personales
de la vida de Saigo que a él le fueron relatadas por su padre y
que sirvieron como referencia para describir al personaje ficticio del
texto en una trama en torno a un maestro y a su alumno de judo.
La
narración, (Posteriormente adaptada y llevada a la gran pantalla
en 1943, por el mejor director de todos los tiempos del cine japonés,
el oscarizado Akira Kurosawa en la que fue su primera película,
al igual que su segunda versión "La Nueva Leyenda del Gran
Judo", en 1945) cuenta,tanto en el libro como en el film, la historia
de un joven que acude a la gran ciudad para ser maestro de judo, el contundente
y nuevo método de Defensa Personal, que apareció en la escena
de la lucha oriental ,y venciendolas, revolucionó absolutamente
todas las artes marciales.
En
esta película el maestro de Shugata Sanshiro se llama "Shogoro-Yano",
en clara referencia a Jigoro Kano, creador de este arte marcial. El film
desarrolla una historia que realmente existió en los primeros tiempos
cuando el judo hubo de enfrentarse en combates durísimos a otras
artes marciales para poder conseguir un lugar de privilegio. Pero en la
película también se articula la vida personal de Shugata
con decisiones en situaciones extremas, valor, humildad, honor, etc, en
torno al judo.
Ambas
personalidades, las de Saigo y Tomita, forman un tanden de especial valía
entre los que hicieron posible la expansión del este método
que desde su inicio no ha dejado de crecer hasta confirmarse como el arte
marcial moderno, que con el tiempo habría de llegar a millones
y millones de practicantes en todo el mundo, consiguiendo ser deporte
olímpico y el arte de la Defensa Personal por excelencia.
*
Artículo publicado en la revista
Judo-Prensa. |